MODA
Chanel
Un glamour más natural e interior, a millas de distancia de las tendencias actuales en la alfombra roja
Twittear Compartir en Facebook
En una larga toma, los modelos desfilaron bajo la sombra de los pinos colocados en la pasarela y extendidos hasta el mar. Entre lo masculino y lo femenino, el día y la noche, la Alta Joyería y los bordados trompe l'oeil, el juego de roles entre estos elementos es una segunda naturaleza que acentúa la elegancia del movimiento.
A un costado de Cap d'Antibes, este mítico hotel se ha convertido en el escenario del desfile Crucero 2011/12. Con su colección y cortometraje, titulado "The Tale of a Fairy", Karl Lagerfeld da vida a su visión chic de la Riviera. Después de Saint‐Tropez en mayo del 2010, la Casa CHANEL ha vuelto a la Costa Azul para explorar lo que Karl Lagerfeld llama "el otro lado del paraíso, " que se extiende desde Cannes a Mónaco. El estilo? "Una cierta disciplina de vestir y un glamour heredado de los años 50, un glamour que es más natural, más interior, millas de distancia de las tendencias actuales en la alfombra roja", comenta Karl Lagerfeld.
En una larga toma, los modelos desfilaron bajo la sombra de los pinos colocados en la pasarela y extendidos hasta el mar. Entre lo masculino y lo femenino, el día y la noche, la Alta Joyería y los bordados trompe l'oeil, el juego de roles entre estos elementos es una segunda naturaleza que acentúa la elegancia del movimiento.
El tweed, organza, satén, chiffon de seda y crepé, como también tejidos suaves, como el tejido de punto, terciopelo de pana y terciopelo esponja armonizan en una paleta gráfica, todo en la sombra y la luz para un efecto fotográfico. Blanco, a veces iridiscente y a veces grisáceo, es más a menudo mezclado con negro en un patrón de cuadros y otras obras de dos tonos. Azul marino, aderezado con toques de color rojo en el ingenio del glamuroso crucero y algunos toques de frescos pasteles: amarillo, mimosa y violeta de Parma.